Escribe “videos educacionales para bebés/niños pequeños” en la barra de búsqueda y verás aproximadamente 200 millones de resultados. A pesar de las advertencias en contra del tiempo frente a la pantalla en la infancia temprana de los expertos, los desarrolladores de estos videos afirman que estos les darán a los niños pequeños un impulso cognitivo. Pero las investigaciones nos dicen que los bebés no solo no aprenden nada de estos videos, sino que en realidad también pueden interferir en el aprendizaje.
¿Qué dicen las investigaciones sobre los videos para bebés y niños pequeños?
Un estudio de la Universidad de Virginia (UVA) se propuso ver si los videos diseñados para enseñarle nuevas palabras a niños de 12- 18 meses, eran efectivos. Los investigadores dividieron a los niños y sus padres en tres grupos: En un grupo, los niños vieron los videos solos. En el otro, vieron los videos con un padre. En el último grupo, los niños no vieron ningún video; se le indico a los padres que trataran de enseñarle a los niños palabras nuevas con cada interacción.
Los investigadores encontraron que los niños que vieron videos durante un mes (ya sea solos o con un padre) no sabían más palabras que los niños que no vieron ningún video. Por el otro lado, los niños en el grupo de padres que enseñaban, aprendieron sustancialmente más palabras que aquellos en los dos grupos de videos.
Este estudio, aunque pequeño, examinó si los niños de edades 6-24 meses que vieron videos en YouTube obtuvieron algún beneficio educacional. Los investigadores encontraron que los niños ciertamente se entretuvieron, pero desafortunadamente no aprendieron nada de los videos.
Los resultados de un estudio de la Universidad de Washington fueron más allá de la conclusión de que los videos para bebés no son educacionales, mostrando que incluso pueden obstaculizar el aprendizaje. Los investigadores encontraron que por cada hora del día que se pasara viendo videos, los bebés entendieron un promedio de seis a ocho palabras menos que los bebés que no vieron videos.
¿Si los videos para bebés y niños pequeños son en realidad educacionales, por qué reciben buenas reseñas?
El estudio de UVA sugiere que la popularidad de los videos para los pequeños puede tener que ver con cuán atractivos son los videos en sí para los padres. Los padres que disfrutaron los videos tenían más probabilidad de reportar que el video era beneficial para su niño, mientras que los padres que no disfrutaron el video dijeron que no lo era.
El autor de este estudio también resaltó que los niños están viendo estos videos durante un momento de desarrollo rápido, y los padres puede estar atribuyendo nuevas habilidades a los videos en vez de al desarrollo natural.
Por último, los niños con frecuencia atraviesan un periodo (o periodos) donde el vocabulario crece rápidamente en un periodo de tiempo corto. Los padres pueden pensar erróneamente que los videos fueron los responsables de esto, cuando en realidad se trata de una “racha de palabras” natural.
¿Por Qué los bebés y niños pequeños no aprenden de los videos?
Gracias a las crecientes investigaciones sobre desarrollo, sabemos que la interacción con los padres y cuidadores es el motor número uno del aprendizaje en los primeros años. De hecho, estas interacciones literalmente dan forma al cerebro del niño de una manera que los afecta por el resto de sus vidas. Este estudio, en particular, muestra cómo el desarrollo cognitivo y del lenguaje prospera con retroalimentación de balbuceos y otros sonidos del niño pequeño. El autor resalta que los bebés aprenden a balbucear al oír a la gente hablar a su alrededor, y entre más personas a su alrededor respondan a su balbuceo, mejor será su desarrollo cognitivo y del lenguaje.
Otro reconocido estudio, que examina la “brecha de 30 millones de palabras”, encontró que el oír más palabras como bebés durante las interacciones verbales con los padres estaba ligado a beneficios extraordinarios años después, incluyendo un vocabulario más amplio y mejores resultados académicos.
Si vemos los videos para bebés y niños pequeños desde esta perspectiva, podemos ver que en vez de enseñarle al pequeño nuevas palabras y conceptos, le están quitando la configuración óptima para aprender: La interacción entre padre e hijo. Las investigaciones también lo confirman, un estudio de la Universidad de Massachusetts mostró que las condiciones
que implican videos para bebés y niños pequeños disminuyen las interacciones entre padre e hijo, en general. Hay algo que considerar: Los niños se pueden beneficiar de “ver en conjunto” videos con un padre o cuidador (esto se refiere a cuando un padre o cuidador mira videos de alta calidad con el niño y luego menciona el tema en las interacciones posteriores).
¿El aporte? No existe evidencia al día de que los videos para bebés o niños pequeños tengan algún tipo de valor educacional y la interacción de los padres y cuidadores es el estándar de oro, cuando de enseñarle a los pequeños nuevas habilidades se trata.